300 gr de judías verdes (Perona a poder ser)
Para la salsa de Miso
2 cucharadas de Sake
1 cucharada de Mirin
3 cucharadas de azúcar
4 ó 5 cucharadas de Miso rojo
1 ó 2 cucharadas de sésamo
PREPARACIÓN
Para preparar la salsa de miso, pondremos en una cacerola pequeñita el sake y el mirin y lo calentaremos hasta que empiece a hervir para que se evapore el alcohol. Apartamos del fuego y añadimos el miso y el azúcar.
Hervimos las judías enteras, sin quitar las puntas con agua con sal. Tienen que quedar muy al dente, así que las dejaremos solo un par de minutos. Cuando las saquemos del fuego, les pasaremos agua fría para cortar la cocción. Quedarán crujientes y conservarán el color.
Les quitamos las puntas y las cortamos en diagonal.
Mezclamos las judías con el aliño de miso y añadimos el sésamo tostado.
Tanto si hemos optado por sésamo crudo como tostado, lo tostaremos un poquito en una sartén.
Para triturar el sésamo, los Japoneses utilizan el Suribachi o mortero japonés, pero podemos utilizar un mortero normal, porqué seguramente no tenemos Suribachi.
El aroma del sésamo cuando se tritura es delicioso.
Y este plato, que es más bien un acompañamiento, es sorprendentemente rico para lo sencillo que es.
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